Placer

Es el placer de inhalar con tus pulmones el hedor antiguo de un armario viejo, ennegrecido por el polvo a la estancia de los años.
Es el placer de sentir tu corazón feliz en medio de una guerra; una guerra helada entre el Cielo y la Luna; una guerra por el espacio, por el tiempo.
Es el placer de recordar; el placer de saber que una imagen de mis labios quedó grabada allá, en un rincón perdido de aquella mente despierta viajando años luz del futuro.
Es simplemente el placer de estar en silencio; el placer de observar tu dulce sonrisa erótica cada mañana.

Un silencio ruidoso.
Una sonrisa triste.
Un beso de mariposa en mis ojos.
Una felicidad inexistente.
Una guerra imaginaria.
Un bosque sin ser tallado.
Un mundo perdido de arcoiris transparentes y viento colorido.
Sabor a vainilla, chocolate. Sabor a beso. Sabor a soledad. Sabor a ti.
Piano. Guitarra.
Amor.
Piruletas de colores.
Placeres...

Pupilas

El cielo envuelve a la luna con una aurora acrisolada de verdades interminables.
Sonrisas al viento son liberadas. Caminantes cuyas huellas quedan grabadas. Desesperaciones que mueren en un rincón del alma.
Sorprendentemente el sol sigue su camino. La luna ocupa ya su lugar y en la tierra brotan flores de colores que provocan agonía en las nubes pintadas de blanco.

¿Sentir felicidad? Mi hermético corazón abre sus puertas a un falso arrepentimiento de coartadas inacabadas. El final del pensamiento del filósofo no ha tocado su fin todavía y mi órgano bombea muy pausadamente el flujo rojizo en mis venas. Sigue pensando el filósofo que odia la luz del sol proyectada en sus cristalinas pupilas. Dilatadas ya quedan en la oscuridad, pues el sol se muere de dolor ante un cielo cuyas  crines esmeralda rellenan el contorno de sus ojos. Ignífugas son las ardientes pupilas del sol y carbonizadas quedan las del filósofo.

Merodean en mi mente tres chicos, tres iris de color: el sol, el cielo... el viento; celeste, verde... oscuro.
Sola me encuentro ahora.
Sonrío.
Estoy feliz, pero sigo estando sola.

Sentimientos de hoy

La muerte que da vida al alma impura de los monstruos oscuros de mis sueños, sigue ahí. Es innegable que no esté. Las lágrimas quieren ver el día y oculto entre sollozos lo mucho que te echo de menos. Ya es inevitable negarlo, ya es inevitable olvidarlo.

Ya lo he perdido, pues no está delante de mi.
Lo he echo.
Silencio en mis ojos.
Llueve en mi alma. Grita el sol, cuya desesperación nada en el humo que expulsa un cigarrillo vacío en los carnosos labios rojizos de una luna perdida en el infinito del universo.
Entre galaxias de colores me encuentro ahora. No sé si reír. No sé si volar. No sé si contar la verdad.

Solo la cuerda que sujeta al individuo por el cuello, aquella que aprieta su garganta, aquella que presiona su respiración; la encargada de disminuir sus pulmones... es la que comprende mi mente perdida en el viento oscuro de la tristeza acumulada.

Añadir leyenda

Bienvenida aburrida.

Mmm... pues no se que escribir en mi pimera entrada. Hola, supongo... y esas cosas.

He creado un blog con la tontería de que todos mis amigos tienen un blog, y bueno, no iba a ser yo la única que no lo tuviera. 

Este blog irá dirigido y dedicado a la vida de Edsi. A sus pensamientos, sentimientos y nosequemás. Su vida en general; por la tanto si queréis conocerme supongo que si os interesa leeréis y si no, quedará en el olvido.

Tampoco tengo intención de interesar, simplemente desahogarme.

Y creo que ya no tengo nada más que decir.